La geometría de la tecnología: renovarse o claudicar
Fabricar móviles hoy en día puede que no sea tan rentable como antaño. Los que vienen de países asiáticos tienen un gran poder de tracción. La disminución del precio de los componentes y la estandarización ha permitido que el mercado de los teléfonos inteligentes haya pasado, en muy poco tiempo, de ser un exponente de vanguardia, al alcance de unos pocos, a ser productos mercantiles. La inmensa mayoría de los ciudadanos de países desarrollados cuentan con este tipo de aparatos tecnológicos que, desde la llegada de las pantallas táctiles, han puesto de manifiesto un nuevo mundo en el que empresas veteranas comienzan a padecer los estragos de otros sectores. Alguien podría pensar que los grandes hitos de la tecnología se producen de manera cíclica. Cada diez años se logra un ingenio que revoluciona todo lo demás. Pero también se puede llevar por delante a agentes importantes que hicieron mover las piezas del engranaje de la innovación. Su momento pudo pasar, pero la historia será la que