Ghost Recon Wildlands: las siete claves del mundo abierto más loco de Ubisoft
Hace prácticamente un año Ubisoft hizo una ambiciosa apuesta de éxito de la mano de 'The Division', un shooter muy elaborado donde la ambientación y el juego en cooperativo eran una parte esencial de la experiencia. En cierto modo ' Ghost Recon Wildlands' retoma ese testigo con una sutil diferencia: ahora no somos supervivientes, somos depredadores.
Ante el inminente lanzamiento de la mayor apuesta del estudio francés para este mes crucial en consolas y PCs, en el que los mundos abiertos brillan por su calidad y cantidad, y tras varias horas de juego en las que hemos intercalado misiones y exploración constructiva hemos llegado a siete conclusiones que definirán las claves de la experiencia bolivariana.
Pero antes, tenemos que partir de lo esencial. En esta entrega de 'Ghost Recon' volveremos a estar a cargo de un escuadrón de élite de los Estados Unidos con una misión que se presenta especialmente complicada: derribar las cadenas que han convertido una vasta región de Bolivia en lo que se conoce como un narcoestado.
Aunque, siendo pragmáticos eso nos dará la oportunidad de abordar una experiencia muy diferente a las gestas de aventuras, arcos y espadas que hay en la actualidad: habrá componentes más tácticos, montones de gadgets y la posibilidad de salvar una nación o destruirla en el intento. Más allá del papel, y tras las impresiones de la versión completa del juego y lo aprendido en las betas, toca ver cómo lo haremos.
Un mundo enorme, lleno de vida, de detalles y muy vertical
La Bolivia del año 2019 que ha plasmado Ubisoft es un entorno muy rico y variado que ofrece pequeños pueblos, extensas llanuras áridas y vistas espectaculares desde lo alto de las montañas. En la beta tuvimos a nuestra disposición un enorme entorno que era sólo la punta del iceberg, aunque abordarlo todo desde el principio -una vez nos hagamos con un helicóptero- puede ser una absoluta locura.
El equipo de Ubisoft París ha prestado más atención a los entornos que a los personajes, y eso se nota desde el primer minuto. Sin embargo, dispondremos de interesantes opciones de personalización aunque los enemigos y los transeúntes no son el plato fuerte de la propuesta y eso se acaba plasmando.
Lo que más llama la atención es la verticalidad del escenario, el cual es abrumador incluso a la hora de recorrerlo en vehículos terrestres y que ni desde el aire podremos abordar por completo. Cuando Ubisoft dijo que era el mayor mundo abierto que había diseñado para un shooter iba muy en serio, pero lo que no nos advirtió es su nivel de detalle.
Tienes la opción y los medios para ser sigiloso... pero al final acaban lloviendo las balas
Ahora bien, tendremos por delante entornos muy destruibles y en los que cada detalle ambiental contará desde el principio. Podremos camuflarnos, aprovechar las infraestructuras para tomar ventaja táctica y las bases de los malos están diseñadas para que haya una o dos soluciones en la que saquemos a relucir las posibilidades de infiltración del juego, y que -curiosamente- evitaremos usar a menos que sea estrictamente necesario.
El uso y la mejora de nuestro dron será esencial para comprender las rutinas de nuestros enemigos y establecer la táctica más acertada, revelandonos la posición de nuestro enemigo y ayudándonos a establecer un plan. Sin embargo, en la práctica -y salvo que nuestro objetivo corra peligro si somos detectados- lo más cómodo será una buena ráfaga de plomo por sorpresa y ser los últimos en quedar en pié.
'Ghost Recon Wildlands' quiere apostar en serio por lo táctico, y ofrece las herramientas, pero desafortunadamente no siempre estaremos por la labor y a veces no nos compensará devanarse los sesos. Eso sí, podremos ajustar el nivel de dificultad del juego en todo momento.
¡Aquí se juega en equipo... aunque se juegue solo!
En ' Ghost Recon Wildlands' estaremos a cargo de un escuadrón y no es posible entender el juego sin nuestros compañeros. No sólo porque en los niveles de dificultad más elevados seremos fulminados incontablemente en cada asalto y necesitaremos a alguien que nos devuelva al juego, sino porque -al contrario que en la mayoría de shooters de los 90- no sería ni sencillo ni divertido acabar con una base en solitario a lo John Rambo.
En cualquier momento podremos unirnos a alguna partida en marcha a través de dos sencillos pasos y si la NAT nos lo permite, pero también podremos dar instrucciones sencillas a nuestro escuadrón con los botones superiores para idear estrategias o solicitarles fuego de cobertura o que mantengan su posición.
Como añadido, incluso entre misiones escucharemos algún chiste por parte de nuestros compañeros bots. Un detalle que dará más consistencia a la propuesta.
La paradoja del cooperativo
Hablar de la inteligencia artificial no tendría demasiado sentido, aunque es importante reseñar que la lealtad de nuestro equipo de bots está por encima de jugar con desconocidos, y esto es importante tenerlo claro.
Si nos sumamos a la partida de otro jugador que se encuentre en una misión y no disponen de micro o sencillamente no establece su plan, nos encontraremos tres posibles situaciones: o bien todos seremos kamikazes, o bien habrá algún rezagado que cambiaríamos gustosos por un bot -y que difícilmente veremos salir en nuestra ayuda aunque a la hora de abrir cajas serán los number one, o bien los veremos esparcidos por el mapa haciendo el cabra o creando estragos.
Si nosotros mismos creamos nuestra partida estaremos prácticamente en las mismas, con lo que al final, si queremos avanzar en el juego, lo más acertado acaba siendo o jugar con contactos que tengas claro que van a estar en las mismas que tu, o respaldado por la IA.
En el fondo, 'Wildlands' bebe demasiado del cooperativo en una fórmula jugable que lo aproxima más a 'GTA V' que a otros shooters bélicos. Aunque, seamos sinceros, sería una lástima desaprovechar todo ese mundo limitandonos a hacer las misiones.
¿Quién es quién en esta misión?
De entrada, y como ocurre con las operaciones encubiertas, la presencia de los Ghosts es alto secreto y si todo sale bien nunca se sabrá que hemos estado ahí, por muchos destrozos que causemos. Seremos cuatro soldados de élite al principio, pero gradualmente iremos estableciendo asociaciones con rebeldes y ganándose el favor del pueblo.
Nuestros primeros aliados serán las fuerzas rebeldes de Pac Katari, aunque dispondremos de dos fuerzas hostiles: por un lado el propio cartel de Santa Blanca y por otro el mismísimo ejército bolivariano que actuará como fuerza de la ley en esos momentos en los que prefiramos hacer el cabra, aunque será permisiva con el orden impuesto
Para poder conseguir nuestra misión tendremos un doble objetivo: promocionar la presencia de rebeldes al tiempo que desestabilizamos el cártel de Santa Clara al 100%. De hecho, el mejor estímulo para hacerlo es que al avanzar en estos dos aspectos desbloquearemos puntos de habilidad que nos harán sacar más partido al juego.
Basta poner la pausa para saber que es de Ubisoft
Los menús, las interfaces futuristas, los pop-up de información que recubren la pantalla generosamente, las mecánicas de movimiento con un botón, el motor AlvilNext. No necesitarás ver la carátula del juego para saber que lleva el sello de la compañía de Rayman.
Si existiera un género llamado juego al estilo Ubisoft, ' Ghost Recon Wildlands' sería un ejemplo de manual, y eso no es malo en absoluto. Tanto los mapas de la interfaz como el sistema de gestión de misiones serán como volver a casa para los habituales de los juegos del estudio galo, y hay que reconocer que 'Wildlands' le saca el máximo partido a esto.
Misiones principales, secundarias, coleccionables.... y el placer de procrastinar
Si conseguimos superar esa fase contemplativa inicial que tiene todo mundo abierto, al final veremos que el grueso de la propuesta vuelve a resumirse en dos fases: llegar en vehiculo a las proximidades del objetivo, descargar nuestra munición y regresar sin ser un coladero. Como viene a ser habitual en los shooters actuales dispondremos de nuestro árbol de habilidades y podremos recoger y mejorar nuestro arsenal. No echaremos en falta ninguno de los elementos esenciales del género.
Tendremos numerosos coleccionables, una generosa selección de misiones principales y encontraremos suficientes tramas secundarias para tener algo que hacer en todo momento, nos unamos a otros jugadores o llendo a nuestro ritmo. Sin embargo, lo que de verdad definirá el juego es nuestra predisposición hacia el mismo.
Tal y como comentamos al principio, esto no es un juego de supervivencia: ahora los depredadores somos nosotros, y Ubisoft nos ofrece un generoso coto de caza y suficientes balas y vehículos para llevar a cabo una fórmula mucho más táctica de lo habitual, y con una serie de objetivos muy concretos para hacer todo lo anterior en nombre de la justicia
También te recomendamos
Con ustedes, 20 empresas disruptivas made in Spain
Comprueba el techo visual de Ghost Recon Wildlands en un vídeo en 4K a 60fps
Ghost Recon: Wildlands nos invita a ver un nuevo tráiler protagonizado por actores reales
-
La noticia Ghost Recon Wildlands: las siete claves del mundo abierto más loco de Ubisoft fue publicada originalmente en Vidaextra por Frankie MB .
Fuente: Vidaextra
Enlace: Ghost Recon Wildlands: las siete claves del mundo abierto más loco de Ubisoft
Comentarios
Publicar un comentario