El día en que llegue la pandemia mundial: la OMS se prepara para la "Enfermedad X"

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No nos damos cuenta, pero el mundo son un montón de piezas de dominó. Cadenas interminables de fichas que, aunque no lo parezcan, solo necesitan un pequeñísimo movimiento para que se vengan abajo. La peste, la viruela, la fiebre amarilla... A lo largo de la historia de la humanidad ha pasado muchas veces y volverá a pasar. Llámalo ébola, llámalo MERS, llámalo "X".

Porque así es como la ha llamado la Organización Mundial de la Salud. Es la primera vez que la OMS trabaja con una patología indeterminada en su catálogo de prioridades sanitarias (enfermedades que requieren una especial atención al poner en riesgo la salud pública) y es paradigmático del tiempo que nos espera.

El enemigo a las puertas

"La Enfermedad X representa la idea de que un patógeno desconocido hasta la fecha podía provocar una epidemia grave a nivel internacional [...]. El Plan de I+D busca explícitamente una preparación transversal que también sea relevante para una enfermedad desconocida", explicaba la Organización Mundial de la Salud. Es decir, se trata de constructo teórico para prepararnos para lo que venga.

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Porque parece evidente que algo vendrá. En los últimos 30 años, el número anual de brotes infecciosos se triplicó en todo el mundo y las enfermedades causantes casi se doblaron. Desde 2007, la OMS ha declarado cuatro "emergencia de salud pública de importancia internacional". Esta fase es la antesala de la fase 6 o 'pandemia global', una pandemia que probablemente llegará.

Como defendíamos hace unos meses, cosas como el cambio climático y la globalización hacen esto cada vez más probable, de hecho. Y no, no estamos preparados. Los recortes, los problemas de financiación y el fracaso de muchos programas de prevención han conllevado la reaparición de la polio, de la tuberculosis en EEUU y el revival de numerosas enfermedades.

Más allá del marketing y de la vistosidad de la "Enfermedad X", todo esto es un buen recordatorio de que tenemos el enemigo a las puertas y esta es una batalla en la que no nos podemos permitir bajar la guardia.