Alexa en la ducha, ¿sí o no?: la lucha entre privacidad y comodidad
Uno de los productos que más nos llamaron la atención en el CES 2020 fue el cabezal de ducha con Alexa fabricado por Kohler. La idea es sencilla: es un cabezal con altavoz, micrófono, Alexa y certificación IPX7 al que pedirle que nos ponga música, las noticias o compré champú. Todo muy futurista, hasta que te paras a pensar en que estás metiendo en el baño un dispositivo conectado a Amazon y que, sin darte cuenta, puedes estar generando datos relacionados con tu consumo. El debate, por lo tanto, está servido. Y es que se plantea una pregunta importante: qué pesa más, ¿la privacidad del usuario o la comodidad de tener una ducha conectada? Llevándolo a un plano más general, ¿estamos dispuestos a conectar todo nuestro hogar y acceder a ciertas comodidades si eso supone que los datos que generamos se usen para intentar vendernos otros productos? Es una pregunta abierta, sin duda, así que hemos invitado a César Muela y Jose García , editores en Xataka, para que nos cuenten su punto