Llevamos años atando cintas a las maletas para identificarlas en el aeropuerto. Sus empleados advierten que es una pésima idea
Yo lo hago. Y puede que tú también. Llega con fijarse en la zona de facturación de cualquier aeropuerto del mundo para comprobar que somos muchos, muchísimos , quienes atamos cintas, pañuelos o cordones a nuestras maletas para diferenciarlas. Una pañoleta de colores llamativos. Una pulsera vieja. Un lazo con un nombre. No importa. La idea es que podamos identificar claramente nuestra maleta de las del resto de pasajeros. Marcarla de forma inconfundible (o eso creemos) para que según asome por la cinta transportadora sepamos que es la nuestra. Resulta que no es tan buena idea como parece. Bueno sobre el papel… Pero no tanto en la práctica. Aunque somos muchos quienes añadimos cintas a nuestros trolleys facturados para identificarlos de un solo vistazo, esa treta tiene sus puntos débiles. Y lo más curioso es que son los propios empleados de aeropuertos los que lo están advirtiendo . Colgar una cinta o un pañuelo del asa quizás te ayude a localizar tu maleta y agilizar la facturació